Novedades-----------------
Novedades-Abucheo a presidente Lobo en velatorio de Dirigente Salinas

jueves, 20 de enero de 2011

Un estado modelo en Honduras

GUATEMALA, jueves 20 de enero de 2011

Un estado modelo en Honduras

Se proponen construir una ciudad con sus propias leyes, autoridades, tribunales, etc., bajo la tutela de un Gobierno extranjero.

Álvaro Velásquez 


Luego del golpe de Estado en Honduras del 28 de junio de 2009 y al que los medios de prensa hondureños se refieren eufemísticamente como “los sucesos del 28 de junio” o bien como “la crisis de junio”, quedó conformado en dicho país un “Estado de derecho” que parece no ser suficiente para promover estabilidad y prosperidad, por lo que el stablishment ha decidido dar un paso adelante al promover una reforma constitucional (concretamente el Artículo 339 y otros) para ceder soberanía al capital transnacional y crear lo que en la práctica es un Estado dentro de otro, llamado “Ciudad Modelo”, descrito desde ya como “el primer territorio libre en América”. 
Las bagatelas de la igualdad ciudadana ante la ley y el imperio de sus propias instituciones, parecen no quitarles el sueño. 

En efecto, tanto la Presidencia de la República de Honduras, como el presidente del Congreso Nacional hondureño, Juan Hernández, han anunciado con entusiasmo en el mes de enero, luego de que el mismo Paul Romer, ideólogo de los Charter Cities, visitara dicho país, que impulsarían la creación de la “Ciudad Modelo” en alrededor de mil kilómetros cuadrados en zona portuaria, para crear allí un sitio seguro para las inversiones nacionales y extranjeras y generar así, supuestamente, un imperio de prosperidad cuyo principal beneficio será la de evitar más migraciones hacia los Estados Unidos, porque, claro, los trabajadores tendrán su propio Hong Kong al cual emigrar sin ir lejos de casa. De repente hasta nuestros migrantes se van para allá.

Al modelo de los Charter Cities (i.e. ciudades bajo estatuto) lo describí de manera sucinta en este mismo espacio, en el marco de lo que entonces denominé la Utopía randiana (Cf. Siglo XXI, 5/8/2010), que para los efectos es igual a la utopía libertaria en general; es decir, contar con un mercado puro y un capitalismo sin restricciones sociales-estatales de ningún tipo, o sea, la Nueva Jerusalén en la tierra. En este caso la utopía lleva el sugestivo nombre de “Ciudad Modelo”. Esta dispondrá de sus propias leyes, autoridades, tribunales, su propio Ministerio Público e incluso su propia moneda (sin banco central off course), bajo la tutela o de un gobierno extranjero o de un consorcio de corporaciones extranjeras. 

Ya un representante del Colegio de Abogados en Honduras la describió como “una gran fábrica” a donde la gente sólo podrá ir a trabajar, pero no habitar, porque quizá los ricos quieran hacer allí su sus propias mansiones, aeropuertos y helipuertos. El hecho es que para las élites políticas y económicas de Honduras, su propia Constitución quizá les parece muy socialista, así como el tamaño de su población muy grande, al igual que su propio territorio, como para convertir a su país en el Hong Kong de América.

Pero, además, quieren ser vanguardistas en materia de libre mercado y propiedad privada, por lo cual lo ven como un signo de apertura: “¿Quiere experimentar la reingeniería social o económica?, traiga su proyecto; nosotros le cambiamos la Constitución para ello”. Los que se oponen, comenzaron a ser llamados conservadores y/o comunistas. 

Me recuerda que en 1955, tras el derrocamiento del presidente Jacobo Árbenz, vino Richard Nixon diciendo que convertirían a Guatemala en una “vitrina de democracia en América”, y lo que vino fue la guerra y la dictadura. ¿No será el síndrome del hámster? 

0 comentarios:

 
Template designed using TrixTG